Lavado de cerebro

El comienzo oficial del descontento, buena parte de los estudiantes sale a la calle. El lema, jóvenes sin futuro. Por supuesto no han tardado en ser calificados como perroflautas, guarros, etc, por esa parte de la población que se autodenomina clase media, como se puede ver echando un vistazo a burbuja.info, sitio donde esta buena gente, decente, trabajadora y limpia, está de sobra representada.

Que podemos decir, bien por ellos. Hay que estar ahí, claro que sí. Algunos dirán, con razón, que ya era hora, pero bueno, ahí estamos. Bien, ahora veamos, los que dicen que no sirve de nada, los de siempre, el grito apático que suele ahogar muchas iniciativas antes de nacer. No vais a conseguir nada, bla bla bla. De estos pesaos apagafuegos hay que pasar, ya se sabe, aunque sean muchos, y repitan su canción incansables. Unos pelmazos, sí, pero es verdad que no podemos quedarnos en manifestaciones. Apenas estamos empezando a luchar, y lo hacemos con los brazos atados. Estoy cansado de oír hablar del pacifismo, es tremendo como nos han colado en la cabeza que ante todo hay que ser pacíficos, que la violencia es mala. Hace tiempo que han propuesto a sus ciudadanos ideales, que son una especie de gilipollas buenrollistas, gente tan moderada, tan pacífica, que se mean sobre ellos y abren la boca tan contentos. Han conseguido que asociemos gente con estudios, con gente formal, o pacífica, utilizando constantemente el término "descerebrado". Refiriéndose siempre a la "violencia descerebrada". Esto repetido millones de veces, desde el colegio, en tu casa, en la televisión, periódicos, pues tiene como resultado, que nos lo acaban colando. Los mismos creadores de opinión se acaban creyendo su propia mierda, no hace falta controlarlos, porque se controlan solos. Y si a alguno de los que viven de manipular nuestras conciencias, un día se desmanda, pues ya sabe que va a la calle a la velocidad de la luz.
Es normal que pongan tanto interés en denostar la violencia, y la monopolicen. Saben que si hacemos uso legítimo de ella, se les acaba el chollo en dos días.
Decir que la violencia es buena o es mala no tiene sentido. Es un concepto absoluto que hay que poner siempre en un contexto. Así podemos hablar de la violencia en defensa propia, considerada legítima. Todas estas cosas deberíamos saberlas desde el colegio, pero la educación que hemos recibido no es precisamente revolucionaria. A lo mejor los franceses tienen estos temas más claros. Choca mucho que un país de cafres como este, donde se cometen legalmente barbaridades contra los animales, donde la policía te abre la cabeza a la menor muestra de rebeldía, luego vayan todos de pacíficos y tal. Por no hablar de la violencia económica, los desahucios, etc. Vemos todo esto, pero cuando se trata de luchar, tenemos que poner la cabeza para que nos la partan, no hay otra opción.
Más nos valdría leer un poco, y empezar a pensar por nuestra cuenta, en lugar de funcionar con la programación mental con la que salimos de los colegios y universidades. Con esa mentalidad de esclavos, de borregos dóciles. Ya va siendo hora de enseñar los dientes, o estamos jodidos. Ves las fotos de esos niños argentinos desnutridos, en los putos huesos, y te recorre la rabia por todo el cuerpo, sabes que es el futuro que le tenían reservado, a los hijos que no tendremos.